jueves, 24 de noviembre de 2011

Querida mamá:

El tiempo no es nada más que pequeñas porciones de vida que gastamos o aprovechamos existiendo. La vida de una persona no se mide en segundos, días, ni en semanas. Es ilógico medirla en términos cronológicos ya que es algo mucho más profundo.. como medir el dolor, el esfuerzo, las sonrisas, los momentos de soledad, los minutos de eterna felicidad, lo que entregamos o lo que recibimos a cambio.
Mamá, siempre has estado ahí formando mi día a día y alegrándomelo de la mejor forma posible. Te he visto llorar, siendo a veces el motivo de tus lágrimas. He crecido aprendiendo de ti, aspirando a seguir tus pasos. Juntas hemos sufrido y disfrutado a tiempos iguales, todo lo que me has dado desde el primer día que salí de ti, todo lo que nos has entregado a cada uno de nosotros, la valentía que presentas, el amor y la dulzura con la que expresas cada uno de tus gestos hacia mí, la manera en que vives por nosotros, cada paso recorrido y los que te faltan por recorrer, ésa ha sido tu vida y de esa manera me gustaría celebrarlo hoy. No por el tiempo que te acompaña, ni por los malos tragos que guardas del pasado, sino por lo grande que me has hecho ser, por el infinito esfuerzo que te he supuesto hasta hoy y por lo increible que eres.
Esa maravillosa mamá que es capaz de todo, esa genial persona que nos hace ser mejores día a día, aquella mamá que nos regala y comparte cada uno de sus días sin recibir nada a cambio. Mil gracias por haber hecho de ti lo que eres, ya que gracias a ello nosotros ahora somos lo que somos. 
Feliz día mamá, pero sobretodo, GRACIAS por tu vida.
Te quiero mucho.

No hay comentarios:

Publicar un comentario